¿Cuál es el mejor método de ahorro? 5 opciones que funcionan

método de ahorroCuando escribes un blog sobre finanzas personales no pasa un mes sin que alguien te pregunte: ¿Cuál es el mejor método de ahorro? Hacía tiempo que quería dedicar un artículo sobre las diferentes técnicas para ahorrar. Ya sabes, estrategias que puedas usar para conseguir tus objetivos y apartar dinero para reserva e inversión. Hoy por fin te presento una selección de métodos. Lee hasta el final, porque todos te pueden aportar algo. Y el último es mi preferido.

En España se ahorra poco

Los datos oficiales muestran que España es uno de los países donde menos se ahorra. Puede que en parte eso se deba a los sueldos bajos. Pero eso solo explica una parte del problema. También hay un aspecto cultural. Muchas personas gastan por encima de sus posibilidades.

Otras quisieran ahorrar, pero no conocen ningún método de ahorro eficiente. Solo conocen una técnica, que no funciona para nada, y que yo llamaría el método de las buenas intenciones.

¿En qué consiste? A principio de mes, te mentalizas. Te prometes a ti mismo que esta vez sí, vas a ahorrar. Tienes las mejores intenciones del mundo para gastar solo lo necesario. Y esperas que al final de mes no habrás gastado todo tu sueldo. Y quizás lo consigas el primer mes, pero el segundo fracasas y te comes lo ahorrado en el anterior.

Créeme, las buenas intenciones no bastan.

5 técnicas para ahorrar

#1 – Método de ahorro de la hucha o del cerdito

Es una técnica que funciona muy bien para enseñar a ahorrar a los niños, y también vale para adultos cuando el objetivo es conseguir dinero para una compra. Tienes muchas maneras de hacerlo, y te voy a resumir las principales.

  • El método clásico. Cada semana metes en la hucha una cantidad fija. Pon por ejemplo que acabas de dejar de fumar y quieres motivarte con lo que ahorras al año. Cada semana metes lo que te gastabas en tabaco en una hucha. Sin eran 15 euros, al final del año tendrás 780 euros. No está nada mal.
  • La desaparición. En este método de ahorro lo que haces es ahorrar cualquier moneda de dos euros (o billete de cinco euros) que pasan por tus manos. Esas monedas “desaparecen” de la circulación. Dependiendo de si usas monedas o billetes y de tu uso de dinero en metálico, puedes ahorrar entre 100 y 500 euros. No es mucho, pero algo es.
  • El ahorro progresivo. Aumenta cada semana en un euro lo que metes en el cerdito. La primera semana pondrás un euro y la última guardarás 52 euros. Al principio es muy fácil, pero a medida que pasa el tiempo se hace más exigente, y te obliga a priorizar gastos. En un año ahorras 1.378 euros. Y supuestamente puede seguir ahorrando 200 euros al mes porque ya cogiste el ritmo.

#2 – El método japonés para ahorrar

Si te interesan las finanzas personales, quizás hayas escuchado del método Kakebo, la técnica de ahorro japonesa. En realidad, no es más que una estrategia muy tradicional de llevar la economía doméstica. Es más, quizás tú o tus padres habéis estado usando el Kakebo sin saberlo.

¿En qué consiste el método de ahorro japonés?

  • Coge un cuaderno. En él escribes tus ingresos previstos para el mes.
  • Además, anota los gastos que vas a tener, diferenciando entre los que son vitales y los que son accesorios.
  • Fíjate un objetivo de ahorro para el mes.
  • Ajusta tus gastos en consecuencia. Si hasta ahora, no has podido ahorrar, era porque gastabas demasiado. Vas a tener que recortar.
  • Cada semana, apunta los gastos reales que estás haciendo. Te permite comprobar como vas y tomar medidas para asegurar que cumplirás tu objetivo.
  • El mes siguiente, vuelves a hacer lo mismo.

Pongamos un ejemplo. Imagina que ingresas 1.300 euros al mes. Sabes que 600 euros se van en alquiler (o hipoteca y comunidad). Cuentas otros 120 euros en suministros (luz, agua, internet, teléfono). En comida pongamos que te gastas 200 euros. El transporte te cuesta 50 euros. Eso ya son 970 euros. Si quieres ahorrar 130 euros (el 10% de tu sueldo), te quedan 220 para ocio, ropa y demás.

El método de ahorro japonés es muy interesante, siempre que seas una persona organizada y metódica. Merece la pena que lo pruebes, porque es una buena forma de entender exactamente en qué gastas.

#3 – La técnica del sobre

Como ya se sabe que muchas veces el presupuesto de ocio es el que descuadra las finanzas personales, existe un método para controlar ese gasto. Se llama la técnica del sobre, y consiste nada más y nada menos en meter en un sobre al principio de mes lo que te vas a gastar en bares, restaurantes, discotecas, etc.

Evidentemente, queda prohibido usar la tarjeta bancaria para pagar en esos sitios. Se supone que, si te acabas el importe del sobre, te tienes que aguantar hasta el mes siguiente.

Como método de ahorro, requiere mucha disciplina. Porque si te llaman para un plan y ya no te queda dinero, tendrás que pasar. Tienes que ver si para ti es realista. Aunque no te tienes que perder tu vida social. Puedes quedar con tus amigos después de cenar, por ejemplo.

#4 – El método de ahorro del día de las facturas

Si crees que la técnica japonesa del cuaderno Kakebo te obliga a un esfuerzo demasiado continuado, tienes una alternativa. Consiste en coger un día cada año para repasar todas tus facturas y tomar medidas.

Concretamente, recopilas tus gastos, usando una aplicación de contabilidad doméstica, la información de tus movimientos del banco y tus recibos. Vas sumando gastos por categorías, y miras donde puedes recortar.

Por ejemplo, si ves que gastas mucho en electricidad, puedes tomar medidas para ahorrar en tu factura de la luz. Si casi no vas al gimnasio, puedes darte de baja. Lo mismo con otras suscripciones que no usas. Y así con muchos más gastos.

La verdad es que es un método interesante para tener controlados todos tus gastos. Si usas el Kakebo, el día de las facturas es un poco redundante, pero si no, merece la pena hacerlo una vez al año.

#5- El mejor método de ahorro: la transferencia automática

Te prometí que iba a reservar para el final la mejor técnica para ahorrar, y aquí la tienes. En realidad, es a la vez muy sencilla y muy potente. Se trata del método de la transferencia automática, que ya te expliqué más en detalle en otro artículo, si quieres echarle un vistazo.

Básicamente, solamente tienes que programar con tu banco una transferencia automática, que aparta una cantidad cada mes justo cuando acabas de cobrar la nómina. Así, te tienes que apañar con lo que te queda.

Al principio empiezas suave, con cantidades pequeñas. A medida que vas adaptando tus gastos, puedes ahorrar cada vez más.

Por supuesto, eso solo funciona si no haces trampa. No vale volver a sacar dinero de la cuenta de ahorros. Y, sobre todo, no vale diferir pagos con la tarjeta de crédito. Sería altamente absurdo endeudarte para ahorrar, pero prefiero mencionarlo por si acaso.

Es el mejor método, porque no te obliga a llevar una contabilidad doméstica formal como lo que ocurre con el método de ahorro japonés. Simplemente tienes un dinero disponible para gastarlo y ya está. Es muy efectivo.

Eso sí, recomiendo hacer por lo menos una vez el ejercicio de escribir tus gastos mensuales en una hoja, y compararlos con tus ingresos. Y en los gastos tienes que incluir la parte proporcional de gastos anuales o trimestrales.

 

¿Conoces algún otro método para ahorrar que merece la pena mencionar? No dudes en compartirlo.

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